La grabación del programa de televisión "Jara y Sedal" de TVE ha aparecido como noticia destacada en el Diario de Arousa del día 8 de junio de 2011.En el día de su publicación se ha podido ver en la web de este diario, aunque en el periódico se puede disfrutar de un amplio reportaje fotográfico.
http://www.diariodearousa.com/
Un magnífico reportaje de LUCÍA ROMERO
el “chasula” con base en cambados sirve a los reporteros de “jara y sedal”
El “Chasula” surca los mares desde hace medio siglo y qué no habrá visto y verá su mástil. Nació de una madera especial para aguantar los duros embates del mar de Malpica, salvaguardando las vidas de los hombres que ocupaban su cubierta, arrastrando las redes cargadas y con ellas, el sustento de sus familias. Era conocido por aquel entonces como “Nuevo Jorge” y su retiro ha sido igual de especial pues la misma actividad le ocupa ahora sus días pero en un tono relajado, dando transporte a todos los amantes de la pesca deportiva que deseen surcar la ría sobre él, cuando no descansa en el puerto de Cambados.
Cuentan los que lo conocen que entre sus hazañas está la recogida de tantos kilos de lubinas que prácticamente hizo ricos a sus tripulantes. Fue en 1977 y años después pasó a una vida más tranquila como barco auxiliar de bateas hasta que sus desgastados 14 metros de eslora tenían las mareas contadas. Fue entonces cuando Isidro Mariño, su actual patrón, lo rescató del desguace y, aplicando sus conocimientos de carpintería y trabajo en astilleros, logró devolverle la vigorosidad con que antaño surcaba los mares. Corría el 2006 y nacía así el “Chasula”, dedicado a la pesca deportiva y a otros usos, principalmente de carácter turístico y etnográficos marineros.
Viaje cinematográfico > En su nueva vida ha proporcionado momentos inolvidables a los aficionados que se han subido a su cubierta. Los últimos formaban parte de un equipo de grabación del famoso programa de la 2 de Televisión Española “Jara y Sedal” que durante dos jornadas “cabalgaron” la Ría de Arousa sobre él y luego, en tierra, aprovecharon para tomar planos de Cambados, centrándose en sus actividades más representativas como el marisqueo a pie.
Sus integrantes, Álvaro Benavent, director del programa y uno de los dos cámaras, junto a Felipe, y los redactores Guillermo González y Raúl Rivera, llegaron de Madrid en mayo pero la emisión de este episodio no tendrá lugar hasta la temporada 2012-2013 debido al laborioso trabajo de producción que dedican a cada reportaje.
Ya demostraron su profesionalidad y respeto por el trabajo bien hecho durante la grabación, para la que emplearon medios técnicos de máximo nivel, usando incluso estabilizadores para no marear después al espectador.
El patrón fue el encargado de guiarlos por las coordenadas de la ría que, según los representantes del “Chasula”, encandiló a los reporteros, así como la “habitual espontaneidad” del propio Mariño. Las mismas fuentes indicaron que “Jara y Sedal”, que el próximo año cumplirá 20 años de emisiones, no se limita a mostrar actividades de caza y pesca. “Van más allá de la actividad recreativa y siempre ofrecen un enfoque que abarca otro temas etnográficos y turísticos de cada zona, relacionados con esas actividades”, añadieron.
El alma de la ría estará presente en todo momento con la aparición de sus elementos más característicos como las bateas, las mariscadoras o sus islas. De hecho, una de las secuencias destacadas por los participantes fue la parada en “Sálvora”, perteneciente al Parque Nacional das Illas Atlánticas, que maravilló a los reporteros con la magia de su aldea abandonada o las historias del rescate que sus habitantes protagonizaron en el naufragio del buque “Santa Isabel”.
Fue un cúmulo de agradables sorpresas que estuvo aderezado por una interesante jornada deportiva donde el patrón de pesca, José, desplegó todo su saber en el manejo de la caña capturando cantidad de piezas entre las que destacó un inesperado congrio de 10 kilos. Tampoco faltó una prueba de la calidad y sabor de los productos de la ría con un arroz con sepia, unos jureles en escabeche y unos mejillones elaborados por el propio Isidro Mariño, cuyas infinitas cualidades no dejaron de sorprender a la tripulación.
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